Sin miedo a las palabras .

Desde el momento en que un Jamaicano con rastas se da la vuelta en el asiento delantero del taxi que has cogido en el aeropuerto , para preguntarte a donde vas ,

lo sabes ,

Hay otra velocidad en el aire .

Huele a tarta .

Es el centro del mundo y se nota .

O lo amas o lo odias .

Ahora mismo estoy lejísimos de ese lugar pero lo he recordado .

Y con todo lo bueno y todo lo malo , he pensado en lo feliz que fui allí las dos veces que estuve .

Mis vivencias fueron de turista , pero mientras no trabajas en una ciudad eso es lo que eres , 

Ya me gustaría a mi ser turista en la mía .

Lo intento dada día 

No hay que tener miedo a esa palabra ,

a mi me parece muy tierno mirar todo con los ojos como canicas con un plano en la mano , con zapatillas de deporte y mochila en estado de total indefensión ante las costumbres y los códigos del lugar .

Es un lujo poder viajar , de la forma que sea .

Para ser viajero hay que tener mucho dinero y mucho tiempo libre , o sea la vida entera libre .

Mientras no puedas ir, puedes prepararte para ir .

Hay dos libros fantásticos y una película , bueno , millones de películas .

Pero recomiendo la de mi novio .